Hace un tiempo, cuando se empezaba a rumorar que mi amante me engañaba con otra mujer, el amante de esa mujer, un compañero muy simpático, se acerco a mi, curioso de saber que pasaba con nuestras parejas, yo no sabía gran cosa, más lo que cuenta la gente y he aprendido a no confiar en los rumores, aunque estos parecían muy ciertos.
Platicamos un rato, él no la amaba a ella, yo si lo quise a él. Nos reímos de nuestros supuestos cuernos, no dudabamos de nuestros amantes, no quisimos creer que era cierto.
En ese momento, él me dijo, si todo esto es cierto, nos vamos a juntar un día y nos vamos a vengar de ese par. Y nos volvimos a reir.
Hoy esa historia quedo confirmada, comprobada y ya causó todo el daño que pudo causar. Ellos están juntos, ella quedo embarazada y jura que de él.
A mes y medio del rompimiento, nos encontramos, nos saludamos y hablamos de otras cosas, no sé como llegamos al tema de la venganza.
No sé que tanto pueda lastimarlos a ellos, yo sé que ella ama en verdad a este hombre, lo busca y lo llama todavía, él no le perdona su traición. É. Se fue con ella cuando yo todavía le tenia un gran cariño.
Ayer decidí vengarme, no creo que salga más dañada. No lo voy hacer por ella, ni por ellos, lo voy a hacer por mí, por esos residuos de coraje que aún me ahogan.
Tal vez no es la mejor decisión, pero mis deseos de lastimar aún dominan a los de autoconservación.
2 comentarios:
Planear una venganza de esa índole, suena más a un pretexto para intimar...Quizá le gustes a este tipo y no se le ocurre otra manera de pedirte algo que no sabe si estás dispuesta a dar...
Sólo recuerda que consumar una venganza no significa iniciar una relación y sí puede implicar otras muchas cosas.
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